Cuerpos no binarixs

El sábado 23 de noviembre en la Facultad de Ciencias Exactas de la UNC, en el marco de las II jornadas Argentinas sobre Etnobiologia y Sociedad, María José Brizuela, estudiante trans de la carrera de Antropología de la FFyH de la UNC, presentó un trabajo sobre: «Procesos de hormonización con plantas en cuerpos no binarixs» 

María José Brizuela tiene 24 años y es una mujer trans. “Vengo de una mamá peruana y un papá argentino”, dice al presentarse.  Su madre estudió medicina en la provincia de Corrientes, pero finalmente terminó desempeñándose como enfermera.  Por esta razón, en la biblioteca de su casa, hubo siempre muchos libros de medicina, biología y genética. “Aunque –comenta– me llevó un buen tiempo comprender que estos libros trataban de describir al mundo sensible de la biología con palabras muchas veces duras”.

“¿Qué cosas hacen que alguien o algo sea masculino o femenino?” se pregunta a modo de disparador. “El sentido común asocia a lo masculino al exceso de vello, las formas toscas, maneras duras de comportarse, falta de sensibilidad emocional y a lo femenino con: los cuerpos redondeados, con curvas, lampiños, la sensibilidad. Y sobre cuerpos hermafroditas o intersexuales, nadie quería responder  ya que no se difunde mucho material”.

Además, dice que “en los libros sobre genética se habla sobre las mujeres barbudas, varones con ginecomastia y genitales intersexos como patologías para ser curadas”. Cuenta que su madre siempre les explicó que las sustancias/extractos de origen vegetal, animal o mineral eran duplicadas molecularmente para así conseguir la versión sintética que se conoce como medicamentos. Así  fue como ella les enseñó a utilizar plantas, yuyos, aceites, infusiones y jarabes, para curarse. Algo propio de las sociedades andinas. De esa manera –añade–, “comprendí que las plantas eran tan útiles como las pastillas, o sustancias farmacológicas”.

En su trabajo de investigación, las preguntas que la orientan son: ¿Por qué en la población andina,  el desarrollo de mamas es tan frecuente, como los maxilares redondeados, curvas, caderas, cuerpos lampiños, y no así en las sociedades europeas, donde vemos barbas, pechos planos, vellos, mamas «atrofiadas»? En este recorrido, indagó sobre cómo la alimentación influye en el desarrollo de los cuerpos y su búsqueda se centró en la composición  de los alimentos y sus propiedades, comparando informes con hechos. 

También pudo corroborar que, en diferentes fuentes y trabajos sobre este tema, por ejemplo en los estudios de los doctores Asscheman Henk y Louis Gooren, se detallan los efectos de estas terapias de sustitución o reemplazo hormonal en mujeres transgénero. Mediante antiandrogénicos (inhibidores de testosterona) y estrógenos o progesterona se pueden provocar cambios irreversiversibles o reversibles.

María José  Brizuela lleva casi siete años investigando en esta temática​, basándose en la experimentación personal, como mujer trans. ​Se inquieta por todo lo vinculado con plantas y planes de alimentación en relación al desarrollo de los cuerpos no binarixs.  

Además, destaca que gracias a la aprobación de la Ley de identidad de género en Argentina logró en un hospital público, analizar su sangre y verificar, en su propio cuerpo, cómo actúa la terapia utilizada.



Foto y Texto: Irina Morán

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