Rodeada por el cariño de toda una comunidad, el lunes 16 de mayo de 2022, en el Museo de Antropologías de la UNC se realizó un sentido homenaje a la trayectoria de Mirta Bonnin, quien acaba de jubilarse. Arqueóloga, museóloga, investigadora, docente, madre y una figura entrañable dentro del campo de la antropología de Córdoba, Mirta –como la llaman todas las personas que la conocen–, fue la primera directora mujer del Museo de Antropologías de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC, luego de casi sesenta años de gestores varones. Y lideró la reapertura del museo en su sede actual.
Cordobesa por adopción, Mirta Bonnin nació en Concepción del Uruguay, Entre Ríos. Estudió la Licenciatura en Antropología en la Universidad Nacional de La Plata. Y fue recién 1983, cuando Argentina apenas recuperaba el ejercicio de su vida democrática, que junto a su compañero Andrés Laguens, decidió radicarse en Córdoba donde ambos fueron pioneros y gestores de todo lo que significa el crecimiento profesional no sólo del Museo, sino también del anclaje y el desarrollo de las ciencias antropológicas en la Universidad Nacional de Córdoba.
Durante los años ´80, Mirta se incorporó a la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC y se especializó en su disciplina, vinculada al campo de la museología, convirtiéndose en una referencia insoslayable a nivel local y nacional. Investigadora de CONICET, se desempeñó como directora del Museo de Antropologías de la UNC entre los periodos 1997 – 2010 y luego retomó ese mismo cargo durante los años 2013 – 2016.
En ambos periodos, no sólo impulsó la gestión de recuperar un Museo de Antropologías con sede propia –Hipólito Yrigoyen 174–, ubicado en el corazón del barrio Nueva Córdoba, sino que marcó una impronta novedosa en la manera de concebir las funciones específicas de la museología y los objetivos sociales de un museo universitario, dentro de esta disciplina.
Durante la ceremonia, además de las palabras de agradecimiento a la trayectoria de Mirta Bonnin expresadas por la decana Flavia Dezzuto; Fabiola Heredia y Andrés Izeta, hicieron entrega de una placa de distinción, que entre sus palabras grabadas decía: «A nuestra compañera y maestra, en reconocimiento a su trayectoria profesional como directora del Museo de Antropologías de la UNC. En homenaje a su trabajo incansable y comprometido por el desarrollo de las disciplinas antropológicas y museológicas».
A este presente, le siguieron una suma de obsequios, mensajes, la proyección de un video fotográfico con el recorrido de su historia, más el detalle de un dije con la tortuga que identifica hasta hoy el logo del Museo de Antropologías, desde el año 2002.
Pero sin duda, lo más emocionante de la ceremonia, fueron las palabras de cada colega, amigx y familiar que se hizo presente, para expresarle el cariño y las diferentes cualidades que distinguen a la personalidad comprometida de Mirta, más el relato de diferentes pasajes de su vida profesional.
En este marco, Marta Dujovne fue una de las primeras personas que tomó la palabra para agradecer el trabajo conjunto que hicieron en el Museo Etnográfico. «La alegría de esos encuentros con Mirta, siempre resultaron espacios de gran aprendizaje», dijo emocionada.
Otra de las personas referentes de la museología que estuvo presente fue Mónica Gorgas, quien expresó un mensaje profundo: “Quiero destacar lo que Mirta hizo por la museología de Córdoba”, expresó de manera sincera. “Viniendo de otra ciencia, ella supo entender que la museología es importante para los museos. La museología permite ver que la ciencia y los museos tienen sentido cuando tienen un fin y Mirta así lo entiende de esa manera”, destacó. “Ella supo convocarnos a todos a los museos universitarios». Y otro aspecto que rescató, «es el modo de gestionar de Mirta Bonnin», dijo.
«La gestión tiene que ver con el gesto. Con la capacidad de escucha. Con la capacidad de compartir. Siempre me sorprendió al venir al Museo de Antropologías, la admiración que Mirta supo despertar en las personas que trabajaron con ella. Y después la gesta: lo heroico de hacer el trabajo”.
Otro de los momentos significativos, fue cuando tomó la palabra Carolina Scotto, primera mujer en ocupar el cargo de rectora de la Universidad Nacional de Córdoba en 400 años, allá por el año 2007. En sus palabras, Carolina destacó la persistencia y el trabajo de Mirta Bonnin y su compañero Andrés Laguens. “He visto pocas personas con la perseverancia y el talento para elaborar proyectos ambiciosos, hacerlos marchar, acompañarlos en su ejecución exitosa y, al mismo tiempo, estar pensando en otros, todos de impacto positivo, tanto para el crecimiento del Museo, como para la creación de diferentes planes de estudio”.
Con el mismo cariño y admiración, Mirta valoró la gestión como rectora de Carolina Scotto, quien supo convocar a las y los directores de los museos universitarios para crear el Programa de Museos, que luego fue el responsable de llevar adelante La Noche de los Museos, resaltó. Después, se dirigió a sus colegas, –directores y directoras de museos–, poniendo en valor el trabajo que actualmente llevan adelante.
Otra intervención emotiva fue la de la investigadora y antropóloga social, Ludmila Catela Da Silva, quien con la voz casi quebrada dijo: “Mirta es la persona más generosa que conozco. De una generosidad y disposición académica en todos los sentidos. Pero además quiero destacar su compromiso con los Sitios de Memoria en Córdoba”, dijo. “El Archivo Provincial de la Memoria no hubiera sido lo que es hoy, sin su apoyo. Todo su compromiso muestra que no se puede hacer ciencia sin compromiso político y humano, que es lo más importante”.
Casi al final, Mariela Zabala agradeció a Mirta Bonnin en nombre de su generación. “Aprendimos con ella en el hacer y en su capacidad de formar equipos. Gracias a Mirta fuimos el primer museo que tuvo un Área de Educación. Somos lo que somos gracias a ella”, dijo.
Mirta Bonnin nombró a cada una de las personas que resultaron significativas a lo largo de casi cuatro décadas de una trayectoria humana y profesional, colmada de compromisos, acciones, familia, trabajos y gestos generosos. Con palabras cálidas y sinceras, agradeció de manera profunda una ceremonia merecida con creces.
El homenaje se realizó en el marco de las distintas celebraciones por el 80 aniversario del Museo de Antropologías de la UNC y la primera década del Instituto de Antropología de Córdoba (IDACOR).
Texto: Irina Morán – Eliana Piemonte.
Fotos: Irina Morán.
Área de Comunicación del Museo de Antropologías de la UNC