Mirar desde otras perspectivas

Tener curiosidad por los museos y la antropología, introducirse a la vida laboral, más la posibilidad de vivir experiencias nuevas, son algunas de las motivaciones que manifiestan, año tras año,  estudiantes de sexto año del nivel secundario, al realizar las pasantías en el Área Educación del Museo de Antropologías de la UNC.

Desde hace más de diez años se trabaja en el diseño de estrategias educativas diversas, situadas y contextualizadas para jóvenes. La práctica de pasantía en el Museo tiene por objetivo generar un espacio de participación en propuestas interactivas que favorezcan el intercambio sociocultual, donde cada estudiante desafíe su creatividad y se generen recursos de simbolización en la construcción de subjetividades.

Las tutoras, Gabriela Pedernera y Silvia Burgos, tienen el rol de escuchar y acompañar a cada estudiante en sus construcciones educativas colectivas para que sus acciones formen parte del Museo. Así, cada pasante experimenta el trabajo como educadores, dentro del equipo del Área de Educación del Museo de Antropologías. 

#ChallengeMUSEO es el nombre que en este 2023 tuvo el proyecto de pasantías. Durante el inicio de las prácticas se conversó con cada grupo de pasantes sobre las primeras impresiones o pre-conceptos acerca de los museos. Allí expresaron ideas como que los Museos son espacios aburridos, vinculados con la historia, el pasado y la cultura. Sin embargo, también dijeron que el Museo de Antropologías es un lugar interesante para aprender y descubrir. Y es desde allí que la pasantía viene a proponer un espacio de construcción de y desde lxs jóvenes. 

El desafío consistió en relacionar intereses y habilidades con los conocimientos curriculares, como así también transitar procesos de aprendizaje, producción y experiencias en museos a partir de la realización de propuestas educativas, desde una mirada antropológica.

Prácticas educativas diversas

Las Pasantías 2023 se organizaron en diferentes grupos de trabajo. En total fueron 40 estudiantes de nueve instituciones educativas: Instituto Inmaculado Corazón de María Adoratrices, Instituto Williams Morris, Instituto General San Martin, Dalmacio Velez Sarsield, Instituto Santísima Trinidad, Instituto Jesuita Sagrada Familia, Escuela García Faure, Colegio 25 de mayo y el IPEM 134 Ing. Regino Maders.

En general, las pasantías abordan el (re)conocimiento de temáticas sociales vinculadas a los museos y la antropología. En esta oportunidad tuvieron diferentes modalidades.

Propuesta educativa 

Esta práctica se desarrolla en nueve encuentros semanales, con una carga horaria de 32 hs en total. En diferentes etapas lxs pasantes se apropian de la exhibición del Museo, ponen en práctica acciones educativas, dialogan con antropólogxs de la casa y entrevistan a distintos actores sociales relacionados de la temática elegida, quienes les cuentan sus experiencias de vida, sus luchas y las problemáticas que lxs atraviesan. 

Este año, conformaron tres equipos de trabajo con estudiantes de otras instituciones, para realizar las propuestas educativas:

▪️ El primer grupo trabajó la temática Pueblos originarios de Córdoba. Aquí se trabajó los contenidos de la sala Mensajes con identidad. Y a su vez, se conversó con la antropóloga Carolina Álvarez, quien compartió los saberes sobre estos grupos indígenas locales.  Además, entrevistaron a Pamela Barrionuevo, integrante de la Comunidad Camiare (Córdoba), para conocer su historia familiar en el proceso de comunalización, que la llevó a reconstruir memorias de su abuela a través de fotografías. Como cierre, el grupo realizó una búsqueda de pistas en el museo con el objetivo de visibilizar la existencia de pueblos originarios de Córdoba.

▪️ El segundo grupo de estudiantes trabajó sobre la muestra Negro sobre blanco. 200 años de racismo. Dialogaron con Ayelen Koopman y Agustín Villareal, quienes compartieron trabajos etnográficos con las víctimas de violencia institucional. Una parte del grupo entrevistó a Soledad Cuello, hermana de Yamila Cuello desaparecida desde el 2009, quien compartió su experiencia de militancia y organización de redes de contención con familiares de las víctimas para seguir reclamando por verdad y justicia. Otro grupo entrevistó a Yoni Díaz, integrante de la banda de RAP Urbano, Villero y Latinoamericano Hermanitos Díaz, quien a través de la música pone en palabras las injusticias que viven los jóvenes de barrios populares. Después de estos intercambios, lxs pasantes realizaron una propuesta vinculada al grupo musical. Y un buzón para escribir reflexiones sobre las distintas miradas que tenemos sobre lxs otrxs.

️▪️ Finalmente, el tercer grupo abordó la temática de las comunidades originarias del Noroeste, y trabajaron la sala La tierra nos cría, la tierra nos come. Cosmopolíticas del cerro. Un grupo interactuó con la antropóloga Verónica Lema, quien compartió sus saberes sobre arqueología en la Comunidad de Huachichocana. Otro grupo dialogó con la antropóloga Lourdes Luna. Ella compartió su trabajo sobre un pueblo de la puna de Jujuy. Luego, entrevistaron vía meet a Alexis Mendez, integrante del movimiento LGBTIQNB+ y miembro de la Comunidad aborigen de Chorrillos (Humahuaca, Jujuy). Ella narró su cosmovisión con la tierra, el agua y las prácticas vinculadas al ciclo agrícola. La propuesta de cierre apuntó a reflexionar sobre la migración interna. Bajo el nombre Un retazo del pueblo jujeño invitaban a lxs participantes a elegir ¿qué objetos representan tu memoria?

Durante la práctica, me di cuenta de que fuimos educados por nuestra sociedad creyendo que los pueblos y comunidades aborígenes eran cosa del pasado. Pero eso no es cierto. Los pueblos originarios siguen estando, aunque las propias sociedades los invisibilizan. Nosotros somos parte de esa invisibilización si los dejamos cómo una parte de nuestro pasado.

Pasante del Instituto William Morris.

Agosto: La Tierra nos encuentra 

La práctica estuvo abocada al evento La Tierra nos encuentra  que se realiza cada año en el Museo. Durante cuatro encuentros, lxs pasantes tuvieron el desafío de elaborar acciones educativas para público en general a partir de los vínculos que tienen lxs propios jóvenes con la tierra, el territorio y la naturaleza.

Para profundizar sobre esta temática,  conversaron con el antropólogo Pablo Pautasso sobre su etnografía con una comunidad de la puna jujeña. Lxs estudiantes indagaron sobre la vida universitaria, la labor como antropólogo y los viajes de campo.  Además, manifestaron interés por saberes y prácticas de la comunidad andina.

En la entrevista con Rocío y Fátima Callohuanca, integrantes de Warminaka Sikuris, se pudo conocer  la experiencia de un grupo de mujeres andinas que hacen música con instrumentos de viento. Ellas  consideran esta actividad como una forma de mantener la cultura viva de los pueblos originarios, en otra ciudad. Como cierre, lxs pasantes realizaron diferentes consignas didácticas para reflexionar sobre la madre tierra. Un grupo propuso un Collage colectivo, otro elaboró una propuesta en base al reciclado,  que culminó con la producción de un mural con hojas reutilizadas para intervenir. Y el último grupo invitó a realizar un Amuleto de la suerte para pedir y agradecer en este agosto. 

El desafío fue escucharnos unos con otros de forma respetuosa. Saber incluir los conocimientos e ideas propuestas, para presentar un buen trabajo y que a su vez sea representativo.

Pasante del Instituto Inmaculado Corazón de María Adoratrices

Acompañamiento laboral 

Una estudiante compartió las actividades del Museo, durante dos semanas. Este tipo de práctica, para su escuela, “posee como objetivo el análisis del mundo laboral para fomentar la experiencia de observación y profundizar en la realidad social del trabajo y del mundo adulto”. De esta manera, la estudiante acompañó  no sólo el trabajo del Área Educación del Museo, sino también  el Área de Recepción del Museo y el Área de Documentación de la Reserva del Museo. Además tuvo un rol activo como observadora participante de los últimos encuentros con el grupo de pasantes del evento “La tierra nos encuentra”, asistiendo al cierre grupal.

Diálogos abiertos

Al culminar la pasantía lxs estudiantes expresaron que la experiencia en el museo no era igual a lo que uno aprende en la clase de historia. La apertura del espacio para compartir opiniones y debatir ideas sin ser juzgadx, hablar frente al público, organizar un evento, construir juegos, y ejercitar el liderazgo y la responsabilidad, son algunas de las experiencias que rescatan. 

Ahora puedo decir que los museos pueden ser ruidosos. No necesariamente tienen que ser un lugar serio y hasta es mejor que no lo sean. Siento que cuando un lugar es menos estructurado te deja más enseñanzas.

Pasante del Instituto William Morris.

Así, a través de esta práctica y experiencias, apostamos a construir diversas maneras de habitar los museos como espacios de encuentro, acción y participación desde las perspectivas de cada grupo de estudiantes secundarios. Las pasantías lograron ser un proceso para construir vínculos entre distintas instituciones educativas y considerar a lxs jóvenes como sujetxs políticos claves para incorporar nuevas miradas y voces en el museo.

¿Qué recomendarías a futuros pasantes del museo?
Que disfruten mucho de la pasantía. Que todo cobra sentido al final y que intenten no encasillarse para disfrutar mucho más la experiencia. Es importante dejar de lado el temor, la vergüenza y las preocupaciones. Además, la predisposición e interés en los temas que elegirán trabajar es crucial. ¡Muchísima suerte!

Pasante de la Escuela Garcia Faure

Texto y fotos: Gabriela Pedernera, Silvia Burgos, Eliana Piemonte, Irina Morán
Área de Educación y Área de Comunicación – Museo de Antropologías de la UNC

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